Lo primero en destacar ante los ojos del visitante es el Pabellón Puente, una vistosa estructura de apariencia metálica y geométrica diseñada por la célebre arquitecta iraquí Zaha Hadid. En su interior alberga una muestra que hace reflexionar sobre la inmensa cantidad de agua que consumimos los humanos, lo dispareja que está su distribución en el mundo, y lo importante que es usarla racionalmente.
En particular me llamó la atención esta computadra donde te hacían un test sobre tus hábitos y te decían cuantos litros de agua consumes al año.
Después, a mano izquierda queda el Palacio de Congresos, espacio de apariencia modernista destinado a muestras culturales y eventos cerrados al público general.
Más al fondo, está la Torre del Agua, que con 76 metros es el edificio más alto del recinto.
En su interior se alberga la exposición “Agua para la vida”, pero lo más interesante es la escultura “Splash”, que a lo largo de 21 metros representa una explosión de agua. En el último piso hay un pequeño snack bar para reponerse del esfuerzo que implica la rampa cuesta arriba.
De los 108 países participantes, el único pabellón nacional que no está hecho dentro de naves industriales prefabricadas es, lógicamente, el del anfitrión. España presentó un pabellón de arquitectura elegante, con columnas largas que emergen de un pequeño estanque. El recorrido inicia con un cine de pantalla esférica, continua con un pequeño museo sobre el agua, dioramas de los diversos entornos medioambientales y concluye con una sección de propuestas españolas de sustentabilidad.
En la siguiente foto se ven 3 pabellones temáticos:
(IZQ.) Pabellón Sed, una muestra artística sobre el problema de la carencia del agua. Contaba con dos salas que mostraban audiovisuales.
(CENTRO) El faro, un pabellón dedicado a las ONGs bastante interesante, es un edificio construido de barro y con técnicas ecológicas para el de aislamiento de temperatura. Sumamente destacable que es el espacio que más
énfasis hace en lo desequilibrado que es el acceso al agua para los más pobres y que menciona ciertos casos de denuncia social relacionados con el agua.
(DER) Agua Extrema, un edificio de formas caprichosas pero estéticas cuyo principal atractivo es un simulador que ofrece al visitante vivir la experiencia de un tsunami, un huracán e inundaciones. Aunque es relativamente “disneylandesco”, tengo que reconocer que fue de lo que más me gustó, por un momento viví la angustia y el peligro de quienes sobreviven a esos fenómenos meteorológicos.
Otros de los pabellones temáticos son:
--Acuario Fluvial: El más grande de Europa, un pabellón que exhibe la vida acuática de 5 ríos: Amazonas, Nilo, Murray Darling, Mekong y Ebro. Sin ánimos de ser aguafiestas (nunca mejor usado el término), me pareció un poco desangelado y simple. Tal vez para los niños pequeños está bien, pero en general hacer tanta cola para algo de innovación limitada no creo que valga mucho la pena.
--Oikos: Agua y Energía: Un pabellón con aires de Museo Interactivo de Ciencia, donde se muestra el potencial del agua como fuente de energía.
--Ciudades de Agua: Una exhibición de fotos de ciudades cuyo diseño gira en torno al agua... lo que más me gustó fue este spot donde sumamente fotogénico. Los modelos son una pareja de españoles (reportera y maestro) que conocí desde el inicio del día y anduvimos juntos por toda la feria. Ellos nos muestran que en la EXPO siempre hay espacio para el amor.
La comunidad autónoma (equivalente español de “estado”) anfitriona, Aragón, contaba con uno de los pabellones más emblemáticos: una estructura que asemeja una canasta; de hecho en las noches ponen frutas inflables en la azotea. El recorrido termina en un salón que cuenta con 8 pantallas y muestra un bellísimo documental de aquella región. En la siguiente foto, pueden ver el pabellón aragonés detrás del edificio de pabellones internacionales, mismos sobre los cuales les hablaré en el siguiente post.
Muy próximo al pabellón aragonés está el Edificio Ríos, que en la planta baja alberga pabellones de las demás comunidades autónomas, Andalucía, Galicia, Cataluña y todas las demás tenían ahí su espacio. En la planta alta había pabellones institucionales y de Empresas patrocinadoras, tales como Ayuntamiento de Zaragoza, Provincia de Zaragoza, IberCaja, Acciona o Correos.
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