4/10/2008

Playboy & XXV - Playboy和二十五

Queridos lectores de La Sexta Estrella, es todo un honor iniciar este post contándoles que la Playboy mexicana de Abril 2008 contiene un artículo cuyo texto fue extraído de los primeros posts de este blog. Gracias a la confianza que me tuvo The Wonderful Ms. Marinstain, fue posible que este mes estuviese incluido entre quienes escriben en la célebre revista del conejito.
El artículo se llama “Un mexicano en Shanghai, O de cómo esperar lo inesperado”… y bueno, ciertamente fue inesperado que no tenga ni medio año de comenzada esta aventura y ya estén cosechándose frutos tan dulces. No pensaba que un estilo casual, con harto slang mexicano, pudiera lograr eso, pero bueno, insisto en hacer alusión a aquello de “lo inesperado” :)

Comentado lo anterior, la otra cosa interesante que ha habido fue mí fiesta de cumpleaños, el mero 27 de Marzo. La llamé "Blue and Red Party", ¿y qué creen? había que venir vestido de azul o rojo. La idea era celebrar que cumplí un cuarto de siglo y que será el primero de muchos cumpleaños en Shanghai. Hice el conteo y en total fueron unos 50 invitados provenientes de 15 nacionalidades distintas. Mi depa no es tan grande, tiene 70 m2, pero así al menos en todo momento se vio lleno. Entre los asistentes predominaron españoles, franceses, italianos, mexicanos, desde luego, y también chinos, dado que ya estoy empezando a hacer amigos locales. Hablando de chinerías, nótese la manera en la que comí el pastel de cumpleaños



Desde luego no podía faltar una buena cena, el menú fue Pollo en Crema de Chipotle, Fajitas del Res al Cilantro, Queso Filadelfia cubierto con mermelada de chabacano, y tostadas, 100% caseras, hechas a mano y de harina de maíz. Al igual que en los buenos tiempos en Cholula, la banda cocina en equipo y el resultado es delicioso. No hubiera podido completar semejante empresa sin la invaluable ayuda de Giacomo, Qinqin (la china de bufanda amarilla), Steph, y mis paisanos Miguel y David (Los dos de la derecha, respectivamente). La de rojo a mi izquiera es Nuriya, una kazajistana despampante, además ella si que tomó en serio el theme de la party ya que incluso se pinto el pelo de azul.



Obviamente, no podían faltar mis “signature cocktails”. Para la ocasión preparé una versión modificada del Praga Passion y dos nuevas invenciones: “Shanghai Mint” y “Mango Island Iced Tea”. Los dos primeros con una base de Vodka y un vino espumoso chino que viene en una botellota y es maravilloso para estos fines. El tercero esta hecho con vodka de mango y un té helado de una marca china que es exquisito, puede que hasta mejor que el San Benedetto o el Arizona. En la siguiente foto estoy con tres españoles: la guapa Vicky, Miguel y Fernando. Miguel, El güero de enmedio, es uno de los dueños de la oficina donde chambeo.



La variedad de música que se oyó fue aún mayor que la de nacionalidades, hubo minimal, cumbia, rock, norteño, pop, reggaeton, electro, lounge, música china... en fin, oimos desde 2 Raum Wohnung hasta Mariana Seoane, pasando por Björk, Las Ultrasónicas, Los Babasónicos, Dj Tiga, Gustavo Cerati, Madonna, Mecano, en fin, un poco de todo. En la primera imagen estoy con Gaetan (Belga) y otra vez con Nuria. La siguiente foto son Arnau y Florian, dos amigos franceses, el primero es DJ y el segundo es de Paris pero tiene raices de Camerún y China.





De atrás hacia adelante son: Vanesa (de Bogotá), Colet (alemana) y Lilian (la que me inivtó a la boda del post anterior). En la foto siguiente estoy con Greg, francés. En la última salgo con Xiao Li, una china que conocí por Nuria y Gaetan que es muy muy buena onda.







La casa quedó hecha un cochinero, pero afortunadamente al día siguiente la aiyi (empleada doméstica) se encargó de que todo regresara a la normalidad. Eso sí, le tomó el doble de tiempo que normalmente, pero también le di un extra. Para los curiosos sobre los costos en Shanghai, les comento que dichos servicios son aparatosamente bajos: ¡10 yuanes la hora! (es decir, un euro o unos quince pesos).

A próposito del cumpleaños, decidí regalarme una bicicleta… desde luego fue una equis; soy realista y no espero que pase mucho antes de que me la roben. No obstante, le compré no uno ni dos, sino tres candados; a ver si con eso se lo piensan un poco más los rateros de bicicletas. Además, no son de los típicos que venden en todas partes, los compré en una tienda muy grande a las afueras de la ciudad… jajaja, ¡yo bien paranoico con lo del robo de bicis! pero es que dos veces en un par de meses, y tratándose, en lo personal, de un objeto tan fundamental, sí te encabrona que te la agandallen.

En fin, lo bueno es que en todo lo demás la ciudad es muy segura y se puede andar por todas partes sin miedo a meterse en la vecindad equivocada; cosa que ciudades como Miami, Nueva York o Paris no estoy tan seguro que puedan presumir, ya ni se diga el D.F. u otras ciudades latinoamericanas. Por último, una muy breve lección de Chino: Feliz Cumpleaños se dice 生日快乐, o sea, "Shengri Kuaile" (Nacimiento + Día + Feliz + Feliz).